Escritorios juveniles: te explicamos lo que necesitas saber

escritorios juveniles

Los escritorios no son sólo para los adultos. Pueden ser beneficiosos para los niños pequeños y los adolescentes. ¿Qué hay que saber sobre los escritorios juveniles para niños?

Puede que no pienses necesariamente que los escritorios y los niños van de la mano, pero añadir un escritorio a la habitación de un niño o instalar uno para él en el salón puede suponer una gran diferencia. 

Tanto si le gusta dibujar, como si le haces regularmente proyectos de manualidades o si acaba de empezar el colegio y necesita un lugar para hacer los deberes, un escritorio puede servir para que tu hijo se concentre y le dé un espacio designado. 

¿Qué hay que tener en cuenta a la hora de elegir un escritorio para tu hijo? Hemos elaborado esta útil guía para que conozcas las ventajas de los pupitres para niños, lo que conviene a su edad y qué tipo de pupitre es el mejor.

¿Por qué debería comprar un escritorio para niños?

Puede que pienses que tu hijo es demasiado pequeño para un escritorio, pero en cuanto sea capaz de sentarse sin ayuda y empiece a jugar con las cosas por sí mismo, un escritorio puede ser enormemente beneficioso. 

No sólo puede salvar tu mesa de comedor de garabatos accidentales, sino que un escritorio específico para tu hijo también puede beneficiarle de varias maneras:

Mejora de la postura – La postura es importante y es demasiado fácil que los pequeños caigan en malos hábitos que les causen dolor y molestias más adelante. Un escritorio y una silla adecuados pueden garantizar que se les anime a sentarse correctamente y así desarrollar buenos hábitos.

Les mantiene concentrados – Ya es bastante difícil conseguir que los niños se concentren, pero lo es aún más si están sobreestimulados. Un escritorio puede garantizar que se concentren mejor en la tarea que tienen entre manos, ya sea un trabajo escolar o colorear.

Fomenta la independencia: crear una zona de escritorio específica para tu hijo significa que tiene su propio espacio. Le ayudará a entender que tiene tiempo para estar solo, que puede resolver las cosas por sí mismo y que puede aprender nuevas habilidades. 

Consigue que se motiven – Probablemente ya sabes lo difícil que puede ser conseguir que un niño haga algo que no quiere hacer, pero un escritorio puede hacerlo un poco más fácil. Crear un espacio interesante e inspirador para ellos puede hacer que se interesen más por las cosas, ¡incluyendo las tareas escolares!

Los escritorios juveniles pueden ser increíblemente versátiles, ya que permiten utilizar el mismo espacio para la escuela y el juego, lo que garantiza que tu pequeño aproveche al máximo el espacio que creas para él. 

¿Cuándo necesitan los niños un escritorio?

Aunque los niños más pequeños no «necesitan» un pupitre, es una buena idea dotarles de algún tipo de mesa propia cuando son niños pequeños (de 18 meses a cinco años). Así podrán beneficiarse de todos los puntos anteriores, además de desarrollar buenos hábitos. 

Por supuesto, cuando se trata de niños más pequeños, hay que asegurarse de que su escritorio sea lo más versátil posible, lo que probablemente signifique que acabe comprando una mesa pequeña y al menos una silla a juego. 

Esto les facilitará el uso y les permitirá utilizarlo de múltiples maneras, incluyendo el juego, las manualidades, las fiestas de té e incluso para comer su cena. 

Cuando los niños crezcan y empiecen a ir a la escuela y tengan que hacer los deberes, deberías pensar en comprarles escritorios juveniles prácticos que les sirva para toda su educación. 

Esto significa, asegurarse de que tienen suficiente espacio para escribir, usar un ordenador o una tableta, guardar artículos de papelería y crecer. De este modo, se asegurará de que pueda utilizarlo correctamente y de que no tenga que sustituirlo con el tiempo.

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